A la pobre Rita se le acabó la IMPUNIDAD. Se le ha acabado la posibilidad de aprovechar cualquier resquicio legal divino.
El blindaje de Rajoy, queda demostrado, no es absolutamente seguro. El poder de Rajoy no es ilimitado. Todos los que odiamos la corrupción acabamos de recibir el aguinaldo, adelantado, de Navidad, desde el cielo.
Ella aceptó el "ostión" electoral, pero no supo asumirlo y digerirlo. De la justicia divina, no todos los delincuentes se libran.
Tal vez, ésto sea el comienzo de una "limpieza" celestial. Si es así, se pueden ir preparando los Blesa, Rato, Urdangarín, los tarjeteros black y todos los "gentuzos" de mal vivir.
Me da mucha pena, cuando me dá, de Don Mariano. Sobre todo porque se le están yendo muchos amigos. Unos a la cárcel. Otros, de sus círculos de amistad, otros al cielo o al infierno.
¡¡Mala suerte, Mariano Rajoy..., te acompaño en tu sentimiento!!
Aunque..., visto lo visto... Cada vez creo mas en Dios y en su justicia.
¿Por qué?. Tal vez porque Dios no nombra fiscales...