Sobre este artículo de "El País", tras su lectura, no me queda mas remedio que puntualizar algunos aspectos que son contados obedeciendo ciertas tendencias de egos interesados.
Lo de: este municipio de 124.000 habitantes comienza a sentirse “resarcido moral y económicamente”, asegura su alcalde, el convergente Joan Mora. NO ES VERDAD. Las heridas que nos han infringido los estafadores de las preferentes, tienen difícil cura. En esta tesitura, el herido no encuentra tranquilidad moral. Lo de "lo económico" es cuestión personal e intransferible.
Sobre el día en que "Tras una expedición a Madrid, donde Mora y plataformas de afectados se reunieron con varios partidos políticos, el Congreso autorizó al entonces Instituto Nacional de Consumo a mediar en el conflicto"..., justo cuando Mora intentaba "algo" con Durán i Lleida", yo estaba reunido con gentes de Mora frente al hotel Palace. Allí descubrí y discutí que lo que intentaba Mora era un tema puramente político, cuando politica habia sido la estafa por "consentimiento y participación en beneficios" sobre la misma. Desde ese día, ellos sabían, los de la plataforma de Mataró (Todavía no creada), que no había mas camino que la vía judicial; como así ha ocurrido. Desde éste blog se pregonó con varios, muchos, muchísimos comentarios, que el ARBITRAJE era otra estafa mas. Ahora dice el político mataronense que se "han resarcido moralmente"..., que explique a los que lo tenían ganado judicialmente por "caso flagrante", como interviene la moral cuando les tienen que devolver el 100% de su inversión y no les devuelven mas del 70 o 75%. Las cosas se cuentan con la verdad o, uno se calla.
Aquí lo político se ha utilizado para parchear políticamente el desastre político-económico de la estafa masiva a que llevaron a los ahorradores lo corruptos políticoeconómicos de turno.
Lo decente hubiera sido luchar por el 100% de la devolución e intentar castigo, con daños y perjuicios por todos los males causados. Lo de "una pequeña pérdida de la cantidad inicial", no es defender "la pela". Es otra mentira. No conozco a nadie que porque tenga 10.000€ se deje robar 2.500€, por ejemplo. ¿Vale, Sr. Mora?. ¡¡Esoo no es verdad!!.
Los intereses mejor defendidos por un grupo de estafados, que no agrupación, lo he visto conseguir en Madrid. No por madrileños ni por ninguna otra razón, secillamente porque nos reunimos un grupo grande de decididos y comenzamos la lucha a muerte contra la injusticia y los intereses asociacionistas. Cada uno nos buscamos nuestro abogado, cada uno fuimos por la vía individual a anular nuestro ilegal contrato y todos lo conseguimos. Yo fuí el primero en recibir la sentencia denegatoria de los derechos reclamados, y seguí adelante en mi lucha persiguiendo la devolución de la totalidad de la cantidad estafada. Hasta que lo conseguí.
Hubo que presentar un recurso que, resultó de general utilización, pero PARA CONSEGUIR EL 100% de la devolución. Todos los afectados que comenzamos en la calle Génova, a las puertas del PP, y después en la calle Alcalá, 1, los jueves, estamos en el final de nuestra lucha con el triunfo en las manos o el dinero en los bolsillos. Pero nuestra lucha ha sido por el 100%, y algunos han conseguido, incluso, mas.
Decir que a través del ARBITRAJE, ha servido para sentirse “resarcido moral y económicamente”, es no decir la verdad. Después de recibir la totalidad de lo estafado nos quedan las heridas del alma, y eso señor Mora, jamás nos hará sentirnos "resarcidos", lo que ocurre es que usted es pólitico, como todos los alcaldes lo son. Unos muy decentes y otros, no tanto.
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CATALUÑA
Mataró entierra las preferentes
Una buena parte de los afectados por los productos financieros de Caixa Laietana podrán recuperar el dinero
STEFANIA GOZZER ARIAS Barcelona 28 JUN 2014 - 20:18 CET
Carlos García y Pere Ayter pueden explicar de forma rápida y sencilla conceptos financieros que, hasta hace un par de años, no sabían ni que existían. No es que hayan hecho un curso avanzado de economía. Viven en Mataró —la ciudad española con mayor proporción de afectados por la estafa de las preferentes— y en los últimos dos años han tenido que aprender a las malas, como muchos de sus vecinos, cuestiones como qué es un producto híbrido o cuáles son las competencias del Banco de España.
Hoy, después de un intenso periodo de juicios y arbitrajes, este municipio de 124.000 habitantes comienza a sentirse “resarcido moral y económicamente”, asegura su alcalde, el convergente Joan Mora. Tras una larga lucha, algunos de los 6.000 vecinos que fueron víctimas de las preferentes —la inmensa mayoría, comercializadas por Caixa Laietana— han empezado a cobrar y la desesperación se ha convertido en una resignada paciencia.
Pere Ayter es uno de los muchos mataroneses que no exagera cuando dice que era cliente de Caixa Laietana “de toda la vida”: su abuelo le abrió una cuenta a los pocos días de nacer. “Me iban poniendo una peseta cada cierto tiempo”, recuerda este agricultor de 50 años. Cuando empezó a oír que “pasaban cosas en los bancos”, no se preocupó por sus 12.000 euros: “Mi mujer y yo somos muy conservadores y no nos gusta el riesgo… Pero luego escuché la palabra preferentes”.
Ayter es uno de los vecinos a los que Caixa Laietana convenció para que transformasen sus ahorros en participaciones preferentes o deuda subordinada, complejos productos financieros que se les vendieron como depósitos a plazo fijo, según afirma la mayoría de víctimas. Cuando la entidad fue adquirida por Bankia, se les engañó una segunda vez al canjearles estos productos por acciones sobrevaloradas del nuevo banco. Esto complicó que accedieran al arbitraje: se les consideraba inversores en vez de ahorradores. Tras una expedición a Madrid, donde Mora y plataformas de afectados se reunieron con varios partidos políticos, el Congreso autorizó al entonces Instituto Nacional de Consumo a mediar en el conflicto.
El 78% de los afectados de Mataró optó por el arbitraje y, de estos, un 92% tuvo un fallo favorable. Uno de los porcentajes más altos del país, según Bankia. Este sistema, sin embargo, conlleva una pequeña pérdida de la cantidad inicial, por lo que otros, como Carlos García, prefirieron la vía judicial.
“Tenía tres cuentas en Caixa Laietana con 18.000, 6.000 y 5.500 euros. Solo me aceptaron el arbitraje en la primera, o sea que además de las otras, iba a perder unos 2.500 de la primera. Para mí, eso era dejar que se salieran con la suya”, explica García. El juez le ha dado la razón hace pocas semanas y calcula que cobrará sus 24.000 euros en octubre. El resto lo tiene en acciones y aún medita si reclamar o no. A Ayter le llegó la sentencia favorable hace meses y está a la espera de que le ingresen el dinero.
El proceso avanza con tanta rapidez que Estafabanca Mataró —la plataforma que durante dos años y medio organizó tres concentraciones cada semana, asesoró a las víctimas y llegó a tener hasta 350 familias activas— ha anunciado su disolución por haber “alcanzado sus objetivos”. La presión social consiguió que se abriera un juzgado transversal para los afectados por productos híbridos. Comenzó a funcionar en septiembre de 2013 y estará activo, por lo menos, hasta septiembre de 2015. Ha atendido 800 casos, a los que se suman los 1.200 que han llevado los otros seis juzgados de la ciudad. Todas las sentencias han sido favorables, asegura el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que cifra la inversión media de las demandas en 50.000 euros.
La abogada del Col·lectiu Ronda Laia Manté considera que uno de los motivos de que en Mataró haya más fallos favorables es que Caixa Laietana no tenía registros tan eficientes como Caja Madrid. “Tenemos demandas de familiares de empleados suyos afectados por las preferentes y las estamos ganando. Muchos trabajadores de la entidad no sabían que eran productos de riesgo. En una ficha interna de 2006, por ejemplo, decía que no lo eran”, afirma.
La vicepresidenta de la asociación Apredef, Arianna Serras, añade otra particularidad a los procesos mataroneses: “La conciencia sobre la materia. Sus sentencias son rotundas, tan bien fundamentadas que no dan lugar a recursos”. Uno de sus defendidos es Ramón Sánchez, de 60 años, que ha recibido hace pocos días el fallo que obliga a Bankia a devolverle los 8.000 euros que tenía en preferentes y los 4.000 que tenía en acciones: “Veo que la justicia puede llegar a ser justa. Pensaba que solo recuperaría el de las preferentes. Estoy súper feliz. Antes no sabía ni para qué servía un juzgado”.
La oficina municipal de información al consumidor aún recibe consultas sobre productos híbridos, aunque ahora a cuentagotas. En dos años atendieron a 3.335 personas. “La gente desconfiaba porque el sistema de arbitraje obligaba a que contactaran con quienes les habían estafado”, explica el alcalde. Así que contrataron a seis personas más. También se creó una unidad de atención psicológica en colaboración con la Fundación Hospital Mataró, aunque son pocos los que la han utilizado. “Las familias han preferido organizarse ellas solas”, afirma Mora.
No todas los han conseguido. García no le dirige la palabra a su cuñado, antiguo jefe de zona de Caixa Laietana y actual director de una oficina de Bankia. Fue él quien le vendió las preferentes y las acciones en documentos que le hacía firmar después de las comidas familiares. “Yo me cambié a esa caja porque él trabajaba allí. Si tienes un familiar que es economista y tú solo tienes la educación básica, te fías”, lamenta. Lo que más le duele es que no ve a sus sobrinos desde hace dos años y medio. Su madre de 80 años también es una afectada, pero acudió al arbitraje y desistió de la vía judicial por miedo a perder contacto con sus nietos.
“Se ha roto la confianza”
A la mitad de su primer mandato ya tenía un sobrenombre: el alcalde de las preferentes. La estafa bancaria ha protagonizado la alcaldía del convergente Joan Mora desde que llegó al Ayuntamiento en 2011. “Se ha roto el hilo de confianza que la banca había ido generando durante años y recuperarlo va a costar muchísimo. En Mataró, nadie volverá a confiar en las entidades de crédito hasta que pasen generaciones”, asegura.
Mora cree que la “desesperación que había en la ciudad” se ha traducido en esperanza: “Ahora se espera a que se castigue a los culpables”. Parte de este “resarcimiento moral” se vivió el pasado mes, cuando el Consistorio declaró a los máximos dirigentes de Caixa Laietana, Pere Antoni de Dòria y Josep Ibern, personas non grata. Era la primera vez que el Ayuntamiento daba este título a alguien. “Como alcalde, fue doloroso. Era una reivindicación de las plataformas a la que tuve que ceder porque los afectados se sentían liberados. Además, se les había dado varias oportunidades a estos directivos para que pidieran perdón y no lo hicieron. Tampoco pusieron a disposición de los afectados sus inmensas indemnizaciones”.
“Lo perdieron todo”
Diego Herrera decidió pasar a la acción el día que vio a sus padres hundidos: “Tenían la cultura del ahorro. Nunca viajaban ni iban al cine. Y de un día para otro perdieron todo”. Él y otros seis familiares de afectados por las preferentes iniciaron Estafabanca Mataró, la plataforma más activa de la ciudad en esta materia. “Nuestros padres no han estudiado, pero nosotros sí”</CF>, así han ayudado a que todos los antiguos clientes de Caixa Laietana a los que atendieron recuperen su dinero.
</CF>”Hacíamos las convocatorias por teléfono porque la mayoría eran personas mayores y no tenían acceso a Internet”, recuerda Herrera, de 39 años. Hace cuatro meses decidieron disolverse. “Nuestros objetivos ya se han cumplido. Y son años de reuniones semanales… Psicológicamente es agotador. Así que nos hemos ido desvinculando poco a poco y este mes ya hemos dejado de funcionar”.
De su memoria nunca se borrarán dos momentos: el dolor cuando el Gobierno excluyó del arbitraje a los ahorradores de Caixa Laietana y la alegría cuando salió la primera resolución favorable para uno de los afectados.
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