La examante de Silva, con sus declaraciones de TBO a lo Mortadelo y Filemón, me produce "desternillamiento". En cuanto a lo de testigo protegido, me hace imaginar la conducta de todos los miembros de la judicatura interviniéntes en el caso.
Andando de por medio los nombres de José María Aznar, Susana Polo, Miguel Blesa, Manuel Moix , Gerardo Díaz-Ferrán, la Fiscalía de Madrid obedeciendo ordenes del fiscal jefe de Madrid, el repetido Manuel Moix. También interviene la Brigada de Policía Judicial de Madrid, que ha aportado interesante informe al que todos los anteriores no hacen ni p... caso. Ellos, todos, van de caza y tienen a la pieza cercada por acoso, aunque se teme que encuentre un resquicio para dar portazo a todos, como ya ha ocurrido en mas de una ocasión.
Pues eso. Que yo no digo lo mismo que dijo Pacheco. Pero algo de risa, si no fuera trágico, si produce. El juez en excedencia, Elpidio José Silva es un hueso demasiado duro de roer y tiene de tonto bastante menos que todos los que le persiguen, además, de ser mas honrado.
El día siete de julio, tal vez veamos un cambio en el santoral. Puede ser que haya que celebrar San Martín en lugar de San Fermín, al menos por parte de alguno.
----------------------------
Pedro Águeda
""Llevo sufriendo con el periodismo desde que empecé, a mediados de
los noventa. Aprendí lo más importante en la agencia Europa Press, donde
un tipo honesto y testarudo se empeñó en enseñarme este oficio. Aún así
le guardo cariño. Pasé por el diario 'Público' con tiempo de contar el
final de ETA y hace ya un tiempo que frecuento la crónica judicial. Un
día me dijeron que una noticia mía había mejorado la vida de algunos que
no tenían nada. Supongo que por eso merece la pena"".
La jueza basa la imputación a Elpidio Silva en una testigo que le acusa de hacer "magia negra"
La
Policía concluye que la mujer peca de "credulidad" al hablar de la supuesta
filtración de los correos de Blesa y el peligro que el juez representa para
ella
La
jueza y el fiscal la convierten en testigo protegido y le asignan protección
policial a pesar del informe de los investigadores
La
mujer declaró en Fiscalía 60 minutos antes de que Blesa enviara un burofax a eldiario.es amenazando con medidas legales por un
especial sobre los correos
Todo
el caso que se sigue contra Elpidio Silva por haber filtrado supuestamente los correos de Blesa se
basa en una testigo que acusa al juez en excedencia de practicar contra ella
"exorcismos" y "magia negra". La mujer, que ante la Fiscalía y la Policía se
presentó como examante de Silva, afirma que el magistrado le pinchó el teléfono
a través de unos colaboradores y que temía que le enviara "un sicario".
Después
de examinar su testimonio y el material aportado a la causa por la mujer, los
agentes concluyeron que los indicios obrantes en la causa no podían sustentar
una investigación y que la testigo pecaba de "cierta credulidad" en sus
acusaciones sobre la filtración de los correos y al considerar a Silva un
peligro para su integridad .
A
pesar del informe de la Brigada de Policía Judicial de Madrid, la jueza del
Tribunal Superior de Justicia Susana Polo mantiene a día de hoy la condición de
testigo protegida para la mujer, que ha pasado a ser denominada en la causa como
TP 1/14. La Policía afirma en su informe del 22 de mayo que los indicios de un
delito de revelación de secretos son "de escaso valor probatorio" y descarta
siquiera interrogar a ninguno de los señalados por TP 1/14. Con ese informe en
su poder, la jueza Polo, sin embargo, imputa a Silva y cita a ocho de esas
personas como testigos. Y no solo eso: en el auto del 2 de junio dice hacerlo
"como consecuencia" del informe policial, que aconseja justo lo contrario.
La
jueza ha adoptado todas estas decisiones a petición de la Fiscalía, que impulsa
el caso por orden de Manuel Moix, el fiscal jefe de Madrid. Moix también es el
responsable de la denuncia contra Elpidio Silva que ha logrado sentar al juez en
el banquillo por un delito de prevaricación, cometido presuntamente durante su
instrucción del ‘caso Blesa’. El expresidente de Caja Madrid, al que Silva envió
dos veces a prisión, y Gerardo Díaz Ferrán –expresidente de la CEOE actualmente
en la cárcel- ejercen la acusación particular en el juicio que retomará
el 7 de julio el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Una
sentencia condenatoria dejaría a Elpidio Silva fuera de la carrera judicial para
siempre. Si prospera el caso de la testigo protegida, Silva podría acabar en
prisión, ya que el artículo 417 del Código Penal castiga con hasta cuatro años
que un funcionario público revele secretos de un particular, en este caso
Blesa.
Moix
ordenó abrir diligencias el 19 de diciembre de 2013, en plena vorágine mediática
por la publicación de los correos. El 14 de enero, el expresidente del Gobierno
José María Aznar denunció ante la Fiscalía a eldiario.es y otros medios por aquellos mensajes
en los que aparecía y que consideraba habían sido publicados con "intención
difamatoria". Dos días después de la denuncia de Aznar, la testigo se presentó
en la Fiscalía de Madrid para aportar su relato. La declaración en la Fiscalía
arrancó a las 18.59 horas del 16 de enero. Exactamente 60 minutos después, la
defensa de Miguel Blesa envió un
burofax a eldiario.es amenazando con medidas legales si distribuía los
ejemplares de la revista 'Cuadernos', dedicada en su número 4 a un especial
sobre los correos del expresidente de Caja Madrid.
Un falso policía
La
testigo llegó a la Fiscalía aconsejada por un tal Alberto, que se le había
presentado como policía retirado por una lesión y que insinuaba pertenecer al
CNI. La testigo dijo a los policías en su declaración del 13 de mayo que la
Fiscalía le negó que el identificado como Alberto Henarejos perteneciera al CNI,
pero le dijo que sí era miembro de la Policía. Los agentes hicieron
comprobaciones y concluyeron que el citado nunca había sido miembro del Cuerpo
Nacional de Policía. Henarejos, según la declaración de TP 1/14, le había
adelantado que en cuanto se presentara en Fiscalía y dijera por qué sería
reconocida como testigo protegida y le pagarían inmediatamente viaje y
manutención.
Según
la declaración de la testigo ante el Grupo III de la Unidad de Delincuencia
Especializada y Violenta (UDEV) de Madrid, Henarejos le "despinchó" el teléfono
que dos personas del entorno de Silva le habrían intervenido, al igual que el
ordenador. Esos dos individuos le habían "sonsacado" información por teléfono y
realizado "amenazas veladas de exorcismos".
La
testigo protegida aseguró haber conocido a Alberto Henarejos a través de Alba
Ledo. Esto sirvió para que la jueza Polo incluyera a Alba Ledo entre los
testigos que prestaron declaración en el juzgado el pasado viernes. TP1/14
relató a la Policía que Ledo había sufrido un esguince y que ella sospecha que
se debe a la "magia negra" que Silva practicó contra ella. La jueza ha evitado
llamar a declarar a Alberto Henarejos.
Una
vez escuchado a la testigo y analizadas las grabaciones y mensajes de teléfono
que aporta, la Brigada de Policía Judicial concluyó: "Se puede afirmar
objetivamente que la TP (testigo protegida) podría pecar de cierta credulidad en
cuanto al peligro que sufre, en cuanto a las posibilidades técnicas de
intervenir y evitar la intervención de sus comunicaciones y el contenido de sus
teléfonos y ordenadores, así como en cuanto a calidad de información que
tuvieron realmente del caso Blesa las personas que menciona que le habían estado
ayudando y apoyado para que denunciase".
Según
la Policía, la testigo "nunca vio el contenido de los papeles" donde se
plasmaban supuestamente los correos de Blesa, ni el de un pen
drive que, según ella, el juez entregó a algunos de los llamados como
testigos. Es más, los agentes no descartan que los correos electrónicos
estuvieran en poder del Partido X antes de que fueran obtenidos para la
investigación del 'caso Blesa'. En este sentido, los policías citan una
entrevista concedida por Hervé Falciani a La Sexta en abril de 2014 en la que el
exempleado del HSBC "alardea" de ello.
La
jueza Polo asegura
en su auto de imputación que la testigo protegida describe en sus
declaraciones "determinadas conductas en sus relaciones personales" con Silva
que podrían ser constitutivas de los delitos de malos tratos psicológicos,
vulneración de derechos fundamentales y falsedad de documentos. Al no haber sido
cometidos presuntamente en el ejercicio de su cargo de juez, la magistrada del
TSJM no es competente para investigarlos y deduce testimonio para que el Juzgado
Decano de Madrid lo envíe a reparto. La mujer asegura haber tenido una relación
de aproximadamente tres meses con el magistrado.
"Una discusión de pareja"
La
testigo había grabado una discusión mantenida con Silva en la época en la que
tenían una relación y decidió entregársela a la Fiscalía. La jueza ordenó a la
Policía que también la analizara, concluyendo los agentes que se trata de "una
discusión de pareja por supuestas infidelidades". La grabación carecía de
calidad por dos razones: se entremezclaban las afirmaciones de los
interlocutores y además la denunciante usa "un tono de voz notablemente más alto
y alterado" que el de Silva. "Ni en los minutos que expresamente mencionaba la
TP 1/14 como de interés para la causa, ni en el resto de la conversación, se
encontró ningún fragmento trascendente para la investigación sobre los delitos
concretos ordenados", concluyen los policías.
Las
afirmaciones de la Policía no han sido tenidas en cuenta por la Fiscalía ni la
jueza y, a día de hoy, la testigo cuenta con protección policial. La figura del testigo protegido en España, según fuentes
policiales y jurídicas, se suele reservar a personas que prestan su colaboración
en casos de terrorismo y crimen organizado, y resulta al menos infrecuente su
aplicación en un caso que investiga un presunto delito de revelación de
secretos. La testigo asegura que Silva le debe 1.000 euros por la corrección del
libro 'La justicia desahuciada', aunque reconoce que comenzó a hacer el trabajo
sin pedirle remuneración alguna y que solo lo hizo cuando vió que se extendía en
el tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario