Mira por donde, os ofrezco una noticia que, espero sea del gusto de todos. Bankia esta llegando a lo increíble. La embargadora, embargada. Vaya calaña de gestores, a la hora de aceptar las decisiones de los jueces.
Continúan creyéndose dueños de opiniones y voluntades, y, poseedores de la verdad universal. ¡Gracias Andrés Chaves, por escribir contra, como y de qué escribes!. Además, lo haces con mi aplauso. ¡Que satisfecho te habrás quedado.!.Copio, corto y pego
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EL MAGO Y SU CUÑADO POR ANDRÉS CHAVES
Un juzgado embargará el viernes el despacho del director de una sucursal de Bankia
30/jun/13 24:51
EL MAGO Y SU CUÑADO POR ANDRÉS CHAVES
Un juzgado embargará el viernes el despacho del director de una sucursal de Bankia
30/jun/13 24:51
Pues a lo mejor la noticia da la vuelta al mundo. Un abogado con despacho en el Puerto de la Cruz ganó a Bankia en los tribunales, en nombre de su cliente, una ejecución hipotecaria que devengó costas que el banco se niega a pagar a pesar de los reiterados requerimientos judiciales. Todo se produce en una sucursal orotavense del banco.
Bankia, que ha abusado de muchos de sus clientes con la estafa de las preferentes, que provoca escenas de pánico entre los afectados, que desprestigia -si es que se puede desprestigiar más- a la banca española, se niega a pagar las costas que los tribunales han establecido en sentencias firmes. Y una comisión judicial embargará bienes de la sucursal de Bankia en La Orotava, según nuestras noticias, el próximo viernes, día 5.
Ese día, si no lo remedia el pago inmediato en efectivo de lo exigido, una comisión judicial acudirá a la sede de la entidad y ejecutará el embargo: pondrá en la calle la caja fuerte, el despacho del director, las sillas y todo el mobiliario que se señale como embargable para cubrir las cantidades de las costas judiciales.
Todo esto después de un largo procedimiento que ha agotado todos los estadios judiciales, primero en un juzgado de primera instancia y después en la Audiencia Provincial. Es decir, que la sentencia que anula la ejecución hipotecaria es firme y la que condena en costas también.
La habilidad del letrado que defendió a este cliente de Bankia ha sido muy comentada y abre la puerta a otras acciones. Examinó las condiciones del contrato y halló tal número de cláusulas disparatadas que los tribunales no tuvieron otra opción que darle la razón.
La escena puede dar, repito, la vuelta al mundo. Imaginen ustedes: un banco embargado por no pagar las costas impuestas de un pleito, en sentencia firme. Si hacía falta más esperpento en la banca española, avisen.
No sé si a última hora la entidad pagará y asunto arreglado, pero si no es así, el escándalo puede ser sonado porque el juzgado acudirá a ejecutar, como es su obligación.
Imaginen ustedes al director de Bankia despachando con sus clientes en la calle, rodeado de "preferentistas" (si es que hay alguno en esa sucursal, que no lo sé), clamando por sus derechos. No le arriendo las ganancias.
La noticia me llegó por casualidad y, naturalmente, no voy a revelar mis fuentes. Pero el espectáculo puede ser grandioso.
Y ahora voy a cambiar de banco. La sinvergonzonería es tan palmaria que un señor me cuenta que el viernes, día 28 de junio, sobre las doce de la mañana, ingresó en una entidad el importe del primer plazo de su declaración de la renta, en efectivo, y le pusieron al ingreso valor del lunes, día 1 de julio. ¿Por qué se permiten estas tropelías? ¿Por qué no puede este señor disponer de su dinero en el mismo momento del ingreso, si se ha realizado en efectivo?
Este jubilado amigo me ha dicho, con toda la razón: "Mire usted, yo tengo mi dinero, el poco que he podido juntar de mis ahorros, en una lata de galletas inglesas. Lo he sacado casi todo del banco. El recibo del teléfono lo abono en Correos, el del Canal Plus con la tarjeta de débito, que además me lo rebajan por usar este sistema; y, si tengo que comprar algo, lo pago al contado. Para mí se acabaron los bancos. Y el año que viene ya no pago renta. Me devuelven dinero".
Así se encuentra mucha gente, harta de entidades bancarias que no sirven sino para cobrar comisiones porque están trancadas al crédito. Sólo quieren reunir dinero, incluso con engaño, para pagar las indemnizaciones lujuriosas a sus directivos. ¿Cuántos hay en la cárcel? Creo que no queda ninguno. Y, si entran, salen enseguida y expedientan a los jueces que los metieron. Asco de país.
Bankia, que ha abusado de muchos de sus clientes con la estafa de las preferentes, que provoca escenas de pánico entre los afectados, que desprestigia -si es que se puede desprestigiar más- a la banca española, se niega a pagar las costas que los tribunales han establecido en sentencias firmes. Y una comisión judicial embargará bienes de la sucursal de Bankia en La Orotava, según nuestras noticias, el próximo viernes, día 5.
Ese día, si no lo remedia el pago inmediato en efectivo de lo exigido, una comisión judicial acudirá a la sede de la entidad y ejecutará el embargo: pondrá en la calle la caja fuerte, el despacho del director, las sillas y todo el mobiliario que se señale como embargable para cubrir las cantidades de las costas judiciales.
Todo esto después de un largo procedimiento que ha agotado todos los estadios judiciales, primero en un juzgado de primera instancia y después en la Audiencia Provincial. Es decir, que la sentencia que anula la ejecución hipotecaria es firme y la que condena en costas también.
La habilidad del letrado que defendió a este cliente de Bankia ha sido muy comentada y abre la puerta a otras acciones. Examinó las condiciones del contrato y halló tal número de cláusulas disparatadas que los tribunales no tuvieron otra opción que darle la razón.
La escena puede dar, repito, la vuelta al mundo. Imaginen ustedes: un banco embargado por no pagar las costas impuestas de un pleito, en sentencia firme. Si hacía falta más esperpento en la banca española, avisen.
No sé si a última hora la entidad pagará y asunto arreglado, pero si no es así, el escándalo puede ser sonado porque el juzgado acudirá a ejecutar, como es su obligación.
Imaginen ustedes al director de Bankia despachando con sus clientes en la calle, rodeado de "preferentistas" (si es que hay alguno en esa sucursal, que no lo sé), clamando por sus derechos. No le arriendo las ganancias.
La noticia me llegó por casualidad y, naturalmente, no voy a revelar mis fuentes. Pero el espectáculo puede ser grandioso.
Y ahora voy a cambiar de banco. La sinvergonzonería es tan palmaria que un señor me cuenta que el viernes, día 28 de junio, sobre las doce de la mañana, ingresó en una entidad el importe del primer plazo de su declaración de la renta, en efectivo, y le pusieron al ingreso valor del lunes, día 1 de julio. ¿Por qué se permiten estas tropelías? ¿Por qué no puede este señor disponer de su dinero en el mismo momento del ingreso, si se ha realizado en efectivo?
Este jubilado amigo me ha dicho, con toda la razón: "Mire usted, yo tengo mi dinero, el poco que he podido juntar de mis ahorros, en una lata de galletas inglesas. Lo he sacado casi todo del banco. El recibo del teléfono lo abono en Correos, el del Canal Plus con la tarjeta de débito, que además me lo rebajan por usar este sistema; y, si tengo que comprar algo, lo pago al contado. Para mí se acabaron los bancos. Y el año que viene ya no pago renta. Me devuelven dinero".
Así se encuentra mucha gente, harta de entidades bancarias que no sirven sino para cobrar comisiones porque están trancadas al crédito. Sólo quieren reunir dinero, incluso con engaño, para pagar las indemnizaciones lujuriosas a sus directivos. ¿Cuántos hay en la cárcel? Creo que no queda ninguno. Y, si entran, salen enseguida y expedientan a los jueces que los metieron. Asco de país.
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