El caso Bankia está haciendo desfilar por la
Audiencia Nacional a la mayoría de los protagonistas del desastre
financiero español, incluido el organismo regulador, la CNMV. Su
director general de Mercados, Ángel Benito, admitió este miércoles que
el organismo para el que trabaja nunca reguló el “mercado interno” de
las preferentes de Caja Madrid porque, sencillamente, este no podía
existir.
Sin embargo, la entidad creó este tipo de
transacciones para que los tenedores de preferentes sólo pudieran vender
a otros clientes de la entidad de forma que creaba un mercado
adulterado que saltó por los aires con la crisis, según mantiene la
acusación popular.
El mercado interno permitió que la
cotización de las preferentes no se correspondiera con su valor real
en el mercado de renta fija de la AIAF, donde deben cotizar este tipo
de productos. Así lo apuntó el director general de Mercados de CNMV
durante su declaración, según fuentes presentes en la misma. Otras
fuentes del caso explican que Caja Madrid trasladaba una cotización
inflada de las preferentes a la AIAF gracias a ese mercado interno que
manipulaba a su antojo. Cuando en abril de 2012 la plataforma
electrónica SEND pasó a plasmar el valor de las preferentes, éste se
había devaluado en un 62%. Fue entonces cuando, según el responsable de
la CNMV, tuvieron “un reflejo de su valor real”, tres años después de
su emisión.
La importancia de la declaración de
Benito radica en que la existencia de ese mercado interno es el pilar de
la tesis acusatoria en el caso de las preferentes, la pieza separada
del caso Bankia que investiga la Audiencia Nacional. La acusación
popular sostiene que la comercialización de las preferentes responde a
un plan organizado que ideó la cúpula de Caja Madrid, con Miguel Blesa
al frente, para obtener capital y tapar el agujero en el que habían
sumido a la entidad.
A pesar de que
un informe de la CNMV desplegaba
con detalle la afirmación que ha realizado Ángel Benito en sede
parlamentaria, la Sección Tercera de la Audiencia Nacional dejó fuera el
case de operaciones, esto es la venta de las mismas dentro de ese
mercado interno, y como consecuencia de ello,
la investigación del delito de manipulación de mercados que atribuía la querella a Blesa y el resto de la cúpula.
Tras la declaración de Benito, una de las acusaciones populares, la que
ejerce el colectivo 15MpaRato, sopesa solicitar al juez Andreu que
recabe toda la documentación sobre las transacciones que se hacían en el
mercado interno. Igualmente, pedirá que un testigo-perito declare en la
pieza separada de las preferentes para que ratifique la existencia de
la práctica irregular.
El propio Benito ha
reconocido que el mercado de las preferentes tenía carácter “bilateral”
en lugar de “multilateral”, pero la pregunta de por qué la CNMV no hizo
nada para atajar esa irregularidad quedó en el aire durante la sesión,
por no ser las preferentes el objeto por el que había sido llamado a
declarar Ángel Benito. 15MpaRato ha solicitado que se incorporen a la
causa correos electrónicos de directivos de Caja Madrid con
conversaciones sobre la creación y funcionamiento del citado mercado
interno.
Planes de nacionalización
Durante la jornada del miércoles también declaró como testigo el
subsecretario del Ministerio de Economía, Miguel Temboury. Este
reconoció que su departamento comenzó a preocuparse por el estado de la
entidad a comienzos de 2012 y que por esta razón sopesó la posibilidad
de su nacionalización mucho antes de que recibiera una inyección pública
de 19.000 millones.
La tercera declaración de la
jornada correspondió a Antonio Carrascosa, presidente del FROB, quien se
refirió al informe de abril de 2012 del FMI que precipitó la
intervención de Bankia. Carrascosa confesó que, a pesar de su contenido,
al Frob le pareció incluso “conservador”.
cárcel sino que está a punto
de cargarse a un juez. A ver, que todos somos iguales pero los del PP
son más iguales que los otros.