Amanecer y conectar una emisora de radio, en cualquier punto del territorio nacional, es un mal comienzo de jornada, para el ánimo de cualquier ciudadano español. Oyes hablar de Güemes, o del Streaptease que dice nuestro presidente del Gobierno Español, Sr. Rajoy.
O de la individua que cuando quiere separa a Catalunya del resto del territorio nacional y cuando la sale de las narices, Catalunya es lo mejor de lo mejor según convenga a sus intereses, pero no por ello deja de ser una impresentable. También hablan del ático del Sr. Gonzalez, el Presidente, no el ex-presidente. O de Urdangarín rechazando la fianza.
O de la princesa Corinna... o..., o...
Teniendo en cuenta que uno solo de estos asuntos, en cualquier otro país, con un mínimo decoro, seria causa suficiente para producir enorme reacción ciudadana, contra la inmoralidad. Pero acostumbrar a un pueblo, en sus amaneceres, a un bombardeo de noticias sobre la corrupción, no es sino normalizar esa conducta. Cuando se estandariza lo indecente hasta acostumbrarnos a ella, es ni mas ni menos, defender la mayor ignominia que se puede cometer contra un pueblo.
Vulgarizar la corrupción es convertir en corruptos a los que nos la muestran. El Código Ético de un médico es cumplir con Hipócrates y su JURAMENTO, "El juramento hipocrático es un juramento público que hacen los que van a empezar sus prácticas con pacientes o se gradúan en medicina, fisioterapia u odontología, lo hacen igualmente otras personas del área de la salud. Se hace ante los otros médicos, doctores y ante la comunidad.
Su contenido es de carácter ético, para orientar la práctica de su oficio, es también el juramento que se basa a partir de la responsabilidad del ser humano y conciencia de ella."
Pues de esta misma forma clara y concisa debe estar en aplicación, el principio y juramento del periodista, para que al lector o al "escuchante" le llegue la información que necesita para vivir en un mundo "decente" y de condena continua al que rebase la Ley.
Digo esto de los periodistas, de los que se pasan de la raya o se quedan a grandes
distancias de ella, porque ante atropellos identicos, "hay gente para todo", ya sabemos lo de la "división de opiniones". Cuanto mas se divide la opinión, mas en evidencia queda la intención en la información impartida. "La deontología profesional periodística es un orden normativo que afecta a la actividad periodística. Está formado por un conjunto de normas o principios generales que, en determinadas circunstancias, se sienten como obligatorias. También desarrollan esta función reguladora, entre otros, el derecho y la moral.
Más concretamente, podría decirse que un código deontológico es un conjunto de
normas específicas de la profesión que regulan la conciencia profesional de un informador. Están basadas en dos principios básicos: la responsabilidad social y
la veracidad informativa. Además, exigen del profesional un continuo reciclaje y autoperfeccionamiento profesional".
Otra deontología es "un conjunto sistemático de normas mínimas que un grupo profesional determinado establece y que refleja una concepción ética común mayoritaria de sus miembros.
Es como una objetivación de los distintos conceptos ético-profesionales subjetivos, que estarán más o menos de acuerdo con su entorno social. Para que tenga vigencia no puede oponerse a las concepciones éticas individuales". "El yo lo sabia desde hace quince años, no vale.
Si lo has callado antes, siléncialo ahora(La omisión parcial es condenable, la eterna jamas la conocerá nadie, ni la sancionara ningún código).
El incumplimiento erróneo o voluntario del medico se lleva con frecuencia a los tribunales, el de los periodistas, si no es muy flagrante, no se lleva nunca. Pero mientras con el Juramento Hipocrático se consigue una ciudadanía sana, con el Código Ético del periodismo se puede llegar, como se ha llegado en España, a la sociedad con opinión y voluntad cada vez mas enferma. Y es que si el periodismo de un país no es capaz de llevar a la población a buena meta, en implicación y defensa de la MORAL y lo social, no es muy bueno nuestro periodismo. Si además escriben defendiendo los intereses de quienes les subvencionan..., apaga y vámonos.
Cuando esto se aplica en un país que va bien, nos da un nivel. Cuando se hace en otro país que va mal, el periodismo acompaña la marcha del país. Por eso vemos el estado de nuestra patria, en general, observando nuestro periodismo y el periodismo extranjero, en el estado real. Como muestra de lo que escribo, y para que ningún "plumilla" se defienda atacándome, recuerdo unos cuantos nombres de periodistas españoles, para que cada lector juzgue sus propias apreciaciones.
El primero, lo es, porque así lo opino yo, en los demás no aplico ningún orden, que no sea el alfabético: Iñaki Gabilondo. Alberto Garzón, Alfonso Rojo, Ana Pastor, Antón Losada, Antonio Burgos, Antonio Gracia Ferreras, Antonio M. Carmona, Antonio Perez Henares, Carlos Carnicero, Carmen del Riego, Casimiro G. Abadillo, Cesar Vidal, Eduardo Inda, Edurne Uriarte, Ernesto Ekaizer, Francisco Marhuenda, Ignacio Escolar, Javier Aroca, Jordi Évole, Juan José Millás, Melchor Miralles, Pedro J Ramirez, Rafael Torres y Victoria Prego.
Hay otro aspecto de la cultura de mundología de la sociedad española, pienso que beneficiosa, aunque no muy positiva por el enfoque informativo, mayoritariamente femenina. Esto es debido a que está en plena explosión la burbuja inmobiliaria, por al tiempo necesarios para titularse, han tenido que transcurrir algunos años, para poder observarlo. Os lo cuento, Cuando los varones aspirantes a periodistas, se dieron cuenta que en el ladrillo tenían mas liquidez de jornales, muchos abandonaron la idea de la Universidad. La mujeres continuaron con su idea, y, hoy las vemos en infinidad de focos informativos. Abundan las féminas, muy por encima de los varones.
Esto en algunos aspectos parece insignificante, pero tiene su miga. Los deseos de informar se han autoseleccionado. Hoy, que lo observo, noto una mayor sinceridad
informativa, con su selección de motivos, de razón, y de verdad. Es lógico. Cuando uno selecciona titulación por motivos del cobro de jornales, no tiene mucho de vocacion. Tendremos que echar un viva por "las periodistas", seran mas naturales y diran mas verdades. Porque seran capaces de arrimarse a los hechos, con sensaciones mamadas, no calculadas.
Hace unas semanas, ocurrio un "sucedido" muy bonito, con una periodista que me estaba entrevistando. Se acercó a nosotros un distribuidor de prensa gratuita. La periodista tomo en sus manos el diario que le ofrecia y le dijo: ¿Por favor se lo puede entregar a aquella señora que esta sentada junto a aquella puerta?. Le dijo que si, y así lo hizo. Giró la cabeza hacia mi y me dijo: Es mi madre.
Acabó, la entrevista y nos fuimos a hablar con la madre. Me dijo que si ella pudiera le gustaria ser periodista, pero que se conformaba con que lo fuera su hija. Que iban a tomar un cafe, las pregunte que si se dejaban invitar y afirmaron. Les hice unas fotos que les envie por e-mail... Desde entonces somos amigos.
Desde que empece a ganarme la manduca, nunca mi madre me acompañó al tajo. Ahora se lo que he perdido. Aunque tambien soy consciente de muchas cosas que la vida me ha enseñado.
Sé observar lo que hacen personajes como Rajoy, de Guindos, Gallardón, Blesa, Rato, Goirigolzarri y otros muchos. Los mismos que se convierten en tus recortadores y ladrones...También se la diferencia entre ganar poco y poquisimo...
Como no quiero amargarme el dia: Virgencita..., virgnecita...
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