Hay veces que lo obvio es tan obvio, que si nos lo pintan del color que mas nos gusta, podemos no detectarlo, nos resultará transparente. Eso es lo que nos esta pasando con los peligros que nos ofrecen, en forma de arbitraje, los dos jefes intervinientes: Goirigolzarri y Rajoy.
No queremos mirar mas, porque nos negamos a ver lo que nos ponen delante. Si desde la manipulación, después de la estafa, ¡¡ojo!!, se nos dice que el arbitraje es nuestra solución, por eso de que no queremos mirar mas, ya estamos condenados: NO HAY PEOR CIEGO QUE EL QUE NO QUIERE VER.
El arbitraje es un problemón, el mas grande después de la estafa, que la gente está aceptando de manera irresponsable, y se acabara demostrando que, sin posibilidad de lamentación posterior.
No se por que me ha dado por relacionar esto, con el chiste que me ha enviado un amigo, y que os voy a mostrar aquí. No puedo remediar, rechazar que la gente no se de cuenta, de que Bankia no tiene dinero,
si los 23.000.000.000€ inyectados, hubieran causado algún efecto, devolverían lo estafado a los preferentistas. Si hablan de arbitraje, quizás quieran decir que nos expulsan de Bankia sin derecho a reclamar, porque árbitros, ya había.
Si ningún estafado quisimos acciones ¿Por que ahora se van al canje (Anterior al arbitraje, y con quitas previas), a cambiar acciones que no valen nada, sin haberles ingresado en sus libretas ni un solo céntimo?. Está todo clarísimo, el primer árbitro que nos eche la vista encima, catalogará la violencia que mostramos en nuestros rostros, contra cualquier atisbo de inteligencia y nos sacará tarjeta roja. Después redactará el acta y posteriormente nos vendrá el palo del Comité de Competición.
Demostraremos la misma capacidad de entendimiento y sutileza que ha demostrado Mariano ante Isabel. Os dejo con el chiste:
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Francisco Esquivel 20.04.2013
No lo sabe nadie, pero Mariano ha ido a tomar el té con la reina de Inglaterra. La visita forma parte de la agenda oculta, que unida a sus intervenciones a través del plasma configuran la personalidad de un mandatario del futuro porque lo que es del presente...
Se ve que el hombre se halla preocupado por su equipo de colaboradores. Al parecer estaba ilusionado con que las advocaciones de Fátima Báñez a la Virgen del Rocío dieran resultado, pero empieza a dudarlo. Y lo que no esperaba ni mucho menos son esas rachas en las que es necesario esconder a Cospedal puesto que para eso ya está él. Así que, según se ha deslizado de forma naturalmente rocambolesca por motivos obvios, en el encuentro Rajoy se interesó ante Isabel II sobre su concepto de liderazgo a lo que la soberana contestó: «Rodearse de personas inteligentes».
Perplejo como comprenderán, el jefe del Gobierno de usted y mío le preguntó que cómo sabe ella si son inteligentes o no, a lo que la monarca respondió: «Lo capto de inmediato haciendo la pregunta adecuada. Déjeme que se lo demuestre». Tomó el teléfono, llamó a Cameron y le dijo: «Señor primer ministro, le ruego que resuelva este enigma: su madre tiene un hijo; su padre tiene un hijo y este niño no es ni su hermano ni su hermana, ¿quién es?». Y, de inmediato, Cameron señaló: «¡Soy yo!». Tras dar las gracias, Rajoy regresó y eligió a Wert para que fuese el primero a quien realizar la prueba. Un poco confundido, el ministro de Educación y Cultura le pidió tiempo para pensar. Nada más salir de la sede en pánico total convocó al resto del Gobierno. Transcurridas varias horas sin dar nadie con la tecla, recurrió al director de la Academia de la Lengua, quien dijo: «Pues, soy yo». «¡Ah, claro!».
Wert llamó corriendo a Rajoy y le espetó: «Ya tengo la respuesta... ¡Es el director de la Academia!». Y Rajoy, indignado, le soltó: «Pero, idiota... ¡Es David Cameron!».
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